De nuevo es octubre y de nuevo florecen los jazmines de mi jardín. Por un mes y medio o dos filtrarán su perfume en subrepticias ráfagas que circulan por el patio y a veces llegan a mi pieza.
Es la última vez, supongo, el último octubre que estaré acá. Y pienso en que nunca pude compartirlo con nadie. Aunque lo intenté (las veces que pude, que fueron muchas menos de las veces que lo deseé).
Así también será la muerte, seguramente. Con certeza sobre la fecha de llegada o no, llegará, y veré que nunca nadie habrá querido compartir nada conmigo.
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2 comentarios:
Muy bella entrada
Parece que alguien lo linkeó en FB....
Si es así, si les gustó, chiflen!
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