domingo, 25 de julio de 2021

Nunca más

El sendero por donde caminamos se angostó mucho más de lo que debería haberlo hecho por el mero paso del tiempo en este último año y medio. Estamos todos con una conciencia de la finitud mucho mayor, como atravesando un campo minado. Yo más, porque no sé si pronto recordaré esta época de visitar frecuente y vanamente a la doctora Siete Minutos como el comienzo de algo que no quiero decir qué puede llegar a ser.
Para sobrellevar esta vida en modo postergación, algunos se inventan la ilusión de una normalidad más o menos cercana con la vacuna, aunque sea con la primera dosis (porque acá compramos la vacuna de dos dosis…; y, encima, la que tiene una segunda dosis más difícil de producir) o mirando las estadísticas que muestran la baja mortalidad del virus chino. O cultivan fetiches como el de lavar con alcohol cada paquete de las compras o el de pasar el trapo húmedo de lavandina en el piso, o lo que sea.
Cada uno, muy razonablemente, se crea su propia zanahoria que le sirva como objetivo o, al menos, como estímulo. Sin embargo, hay cosas incluidas en esa fantasía que ya no van a ser. No sabemos cuándo podremos volver a la normalidad de los recitales, pero, cuando suceda, hay dos personas que ya no van a tocar. Los dos últimos shows a los que fui eran de gente a la que no voy a poder ver más, que no está más acá.
No va a haber más recitales de Sué Mon Mont, no va a haber besos en recitales de Sué Mon Mont (y, como nunca los hubo para mí, tampoco va a haber la ilusión renovada de que pudiera llegar a haberlos). No va a haber más recitales de Palo, no va a haber planes de cruzar media ciudad o medio conurbano para ir a verlo (hace mucho que no existe la ilusión de ir con alguien).
Con Palo se fue un pedazo de nuestras vidas, no solo de la vida que vivimos, sino de aquella con la que podríamos soñar. Por lo que vi en redes sociales, la mayoría de la gente que lo llora lo descubrió con Los Visitantes, que sonaban mucho en la radio a mediados de los 90: gente que hace poco inauguró el 4 adelante en su edad. En mi caso, y a diferencia de ellos, no es la banda de sonido de la adolescencia, sino música que me acompañó todo el tiempo, que me siguió gustando de grande, y que, además, pude compartir en vivo con alguna persona, lo cual me resulta especialmente significativo dadas mis dificultades para la sociabilidad (?).
Igual, tampoco quiero abundar en historias personales tan solipsistas como todo lo que digo siempre: para historias personales con link en el afuera hay un bonito texto de Helena P.B.
Al pasar, y sin que sea una militancia de nada, sino apenas la observación de algo evidente que, sin embargo, los medios adoradores del obituario callan, quiero decir que Palo se murió como dicen los conspiranoicos (?) que se muere la gente vacunada. Igual, digamos todo, no es una mala muerte: te apagan el interruptor y chau. (Igual, ya lo dijo en 1992: “En el río de asfalto muere la gente”).
Tal vez una nueva zanahoria para agarrarnos al futuro podría ser pensar una banda de post punk pandémico, o de punk post pandémico, que se llame Grafenados.
No sé dónde escuché que por cada rockero que muere nace un trapero: ¿quién, ahora, rockero o trapero, haría a los veintidós años una canción no elitista no onanista sobre una película de Wajda? Como sea, cada vez quedan menos lazos, y la intuición de que no habrá otros nuevos que nos sostengan o nos mantengan en contacto. Quizá vaya siendo hora de empezar a pensar seriamente en nuestra muerte en lugar de lamentar tanto las ajenas.
Esta lista de videos no es un regodeo necrofílico, es la actualización de una lista que tenía para mí. Pensaba que era para matizar el mientras tanto, pero de pronto es todo lo que tenemos y lo único que nos va a quedar, la dopamina adulterada del recuerdo del recuerdo.

Unos nenes de 22 años en lo de Badía

Un año después (sí, así empieza)

Realmente

Los Visitantes, 1993 (show completo)

Guerra tras guerra (en La Trastienda, sonido horrible)

En el Parque Lillo de Necochea (solo audio, gran sonido)

Un cover de Sumo by Los Visitantes

Los Visitantes en el Canal de la Música, 1997

Solista, con un raro peinado nuevo en Much Music

El Palo Tanguero haciendo Naranjo en flor

Gusanos esperan gozar con tu encuentro

Tabernero

Turbias golondrinas

Luminoso y eterno

Con la Fernández Fierro

Tinta roja (2020: si no se moría, iba derechito a ser el nuevo Goyeneche)

Volviendo al rock, un video en el Roca

Te quiero llevar (en Music Country)

Solo set en Estudio Abierto

Sangre, en lo de Fantino, demudando a los caretas

Tapa de los sesos

Botes quebrados en el Tasso

Punk con la acústica

Parado ahí

Que se abra

Antojo

En Santana de Ramos, un show donde estuvieron presentes dos lectores de este blog, que fueron cada un@ por su lado

Tanta trampa, de la misma noche

A través de los sueños, las nenas, siete vidas, en San Telmo

El ente, en Lanús, donde doblaba el 165

La balada de los tres ahorcados, esa noche de diciembre en el CAFF que hacía tanto calor

Exodo, de la misma noche

Otra de esa noche, la polémica versión de Karma Police

A este show no fui, dejo el link porque la versión del 26.9.09 no está en la web (pero en mi memoria, siempre)

Hard rock con bandoneón

La humildad de tocar con una banda local en San Martín de los Andes

Aquella noche de Martínez: El rosario en el muro

Aquella noche de Martínez: Visores y Tazas…

Aquella noche de Martínez: Soy el visitante

Aquella noche de Martínez: Ella vendrá

De la mano te quiero llevar

Karma Police y Catarata de amor, locura

Con BBK en una estación del Sarmiento

El sol

A cada persona se mide por el tamaño de su corazón

Jane Fonda y Jon Voight

En el río de asfalto muere la gente

El leñador en una radio barrial

Otro gris atardecer

Tazas en Santana, más acá en el tiempo, con dos eléctricas

Un cachito de Bi bap um dera en Niceto

Un show entero en ¿Benito Juárez?, formato trío

La última vez que fui a verlo

Popurrí de “Patria o muerte” con la acústica (!), un show durante la cuarentena

Córdoba 2021, show completo, solo set

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Algunos más que subieron a la web luego de que publicara el post (segunda addenda):

Hacenos bailar, Palo… Los Visitantes en Cemento, 1992

Los Visitantes en la calle… Alberdi casi Lacarra

Los Visitantes en el Nuevo Rock Argentino – Córdoba, 1993

Catarata de amor, con la acústica en un radio de Córdoba, 1993

Los Visitantes en Much Acústico, 1994

Los Visitantes, acústico en Rock de Acá (FM Rock and Pop, 1994)

Un Auto Unión acústico en Music 21 (!)

Los Visitantes casi Don Cornelio: Tazas…, grabación encontrada de 1998 con el gordo Claudio en batería

Te quiero llevar, Cosquín Rock 2001

Tremendísima versión de Virgen en Music Country

­­A desalambrar (y sí, era octubre de 2001)

­­Chiquillada, más acá en el tiempo

­­A través de los sueños, Comodoro Rivadavia, 2006

­­El enviado, el chimango, la soledad, solo set en Olavarría

­­En una fiesta de casamiento (!!)

­­Sangre, con Jake, el violinista yanki, 2009

­­Otra Sangre, en Zapala, verano 2010, con un público que se sabía toda la letra

­­Las nenas, Jujuy, 2010

­­Tazas, enfrente del Spinetto, esa noche que no entramos

­­Estaré en un asado, con músicos de Azul

Aquella noche de Martínez: El ente

Un tema de Desequilibrio en Olavarría, 2011 (5 views al momento de escribir esto)

­­A través de los sueños en el Senado. Si mirás bien, capaz me ves.

Bi bap um dera a dos acústicas, Mendoza, 2012

Las chicas alegría

Cómo me gustan los videos donde se ve gente saltando y bailando

Antojo, con público en el escenario, casi como aquel show de Los Visitantes en CM

Madre computadora

2014, La Hermandad en “Música Circular”, una producción del ministerio de Planificación (?), cuarenta minutos, re buen sonido

Palo y los Gorriones en La Plata 2014 tocando Playas…

Cabeza de platino en una radio de Boedo

Un reflejo, en el Recoleta, verano del 18, ¿cómo no me enteré? (dos cámaras, excelente sonido)

Karma Police en una librería de Sarmiento (Chubut), 2018.

Canción cántaro, desde otra perspectiva.

Paloma (y gran parte del show en la lista de reproducción) en Trelew, 2019

A través de los sueños, 2019. Otra producción muy pro, extático close up

Más cuarentena, tres temas, con la cámara “acá”, para ver todos los acordes

Todos los tangos, 2020

Con distanciamiento social (?) en la plaza de atrás de la estación…, ¿¡cómo me lo perdí!?

Solo set en Agua de Oro (Córdoba), verano de 2021, un público muy encendido

En la terraza de Niceto, 17/6/21

1 comentario:

y.O. dijo...

Una cosa especialmente triste es que Palo se murió viviendo de prestado. Una vida de laburo y reconocimiento para terminar mendigando un techo.
Otra cosa triste, y llamativa, es que los dos párrafos que mencionaban el asunto en la nota original de la Rolling Stone desaparecieron de la versión que se puede ver en la web.

Durante la pandemia, Palo vivió en la casa de su hermana, Laura. “Ella le dejó su casa, se fue a Mar del Plata porque había sido abuela. Cuando volvió prefirió que Palo no estuviera entrando y saliendo por una cuestión sanitaria. Necesitaba una casa y no teníamos la liquidez para alquilar algo”, cuenta Germán. El músico atravesaba una larga separación de Verónica Palmieri, artista plástica y madre de sus dos hijos más chicos, Francesca (16) y Vito (11). El círculo familiar de Pandolfo lo completa Anahí (19), la hija concebida por Palo y su ex pareja Karina Cohen (integrante de Los Visitantes).
“Cuando arrancó el verano por suerte salíamos a tocar todos los fines de semana. A veces se quedaba en su casa con sus hijos en Paso del Rey. Estaba ahí en una convivencia no muy feliz. Después empezó a rebotar en algunos lugares: en lo del tío, en Paternal un mes, y en Amapola, un centro de música donde estuvo los últimos dos meses. Ahí tenía un cuarto, un estudio y abajo se daban clases de piano y música. El lugar se lo prestó su profesora de canto, Sandra Entin”.


Más llamativo aún cuando la primera canción del disco habla de eso, y empieza diciendo “No tengo casa”.
(También dice “No tengo ganas de andar por el suelo... El frío cielo esperando el gong”. Auch).